En este artículo pasaremos a explicarles los detalles acerca del estilo escandinavo o nórdico, un estilo decorativo que se destaca por la simplicidad, los pocos objetos utilizados, la amplitud de los espacios “limpios” y la optimización de la luz solar. Además uno de los aspectos más importantes es el hecho del cuidado de la iluminación natural, ya que es sabido que en los países nórdicos la luz solar es escasa, y las pocas horas que entra a los ambientes hay que aprovecharla.
La importancia de la luz
Si prestamos mucha atención tanto a los estilos de construcción como de decoración de estas zonas del planeta, veremos que todo está diseñado para retener la luz natural y aprovecharla lo más posible. Es por esto que los ventanales son enormes y casi no se usan las cortinas.
En cuanto a las paredes, generalmente están pintadas de blanco o de tonalidades muy claras y presentan poco detalles, de vez en cuando un cuadro pequeño, un reloj, etc. Los muebles también presentan tonalidades claras o por lo menos acabados tenues.
Existe una gran predisposición a la utilización de grandes lámparas, algunas colgantes y otras de pie, ya que los días nublados se utilizan casi de forma de continua.
Si queremos aplicar este estilo decorativo producto de la necesidad de luz, debe ser en aquellos ambientes donde no tengamos aberturas suficientes como para dar pase a la luz, oficinas en edificios o departamentos con poca luminosidad, etc. Verás como aplicando algo de la sabiduría escandinava podrás optimizar los pocos rayos de sol que tengas por día.
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