¿Alguna vez soñó con tener su jardín como el de las películas que ve por televisión? ¿Quiere darle un toque mágico, misterioso? Para conseguirlo sólo tendrá que conocer los modos para iluminar exteriores existentes.
Cada modo para iluminar exteriores crea su propio efecto. En algunas ocasiones el contraste de la luz con la oscuridad, puede resultar realmente fabuloso. En otros, el hecho de que no se vea la fuente lumínica, puede producir un efecto misterioso.
Luces por todos lados
A continuación le contamos acerca de los diferentes modos de iluminar exteriores que existen:
Spots. Estos elementos resultan muy prácticos y económicos. Se utilizan básicamente para iluminar plantas o estatuas, aunque su mayor efecto lo producen en fuentes (gracias al movimiento del agua).
Iluminación para abajo. Este tipo de iluminación, tal vez la más utilizada, se usa para seguridad o para realizar actividades, tales como cocinar o leer.
Iluminación para arriba. Es un modo de iluminación decorativo, ya que ilumina árboles (más específicamente sus copas), parras y pérgolas. En ella puede utilizarse luces de colores, que crearán un ambiente más festivo.
Iluminación de sendas. En este tipo de iluminación, se utiliza básicamente una fuente de luz que ilumine para abajo. Es muy importante que se utilicen focos de baja potencia, ya que las potencias altas pueden incomodar la vista de quienes paseen.
En este último caso, también puede utilizarse iluminación para arriba, prestando una mayor importancia al sentido de los focos, pues no deberán cruzarse con el campo visual de quien transite la senda.
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